Llamas a un hotel: 
Quieres reservar la siguiente habitación:
¿Cuándo?
¿Cuántos días?
¿Cuántas personas?
¿Cuánto cuesta?
¿El desayuno está incluido?
¿Hay restaurante en el hotel?
¿Cuánto cuesta cenar?
¿Cuál es el horario?
¿Hay que reservar?
¿Hay spa, actividades, piscina, ...?
Vas al restaurante: 
Pero van a cerrar antes de lo que te han dicho.
¿Por qué?
¿Dónde puedes encontrar otro restaurante?
¿Es caro?
¿A qué hora es el desayuno mañana?
¿Qué horario tendrán mañana por la noche?
¿Tienen menú?
Reserva una mesa para 3 en uno de estos dos sitios: 
Necesitas coger un taxi y llamas para reservarlo: 
Llega 20 minutos tarde.
¡Quéjate educadamente!
Dile a dónde quieres ir: 
¿Cuánto cuesta aproximadamente (tiempo/dinero)?
Ves un kiosko y recuerdas que quieres comprar algo: 
Para el taxi y compra 2 artículos.
¿Cuánto cuesta?
¿Tienen agua o refrescos?
¿Periódicos en otros idiomas?
Paga.
Deséale un buen día.
Vuelve al taxi y paga.
Al final del día, en el hotel, te quejas por lo sucedido en el restaurante en el desayuno.
Pide que te recompensen de alguna manera.
